Mi debilidad por el estilo nórdico no es ninguna novedad. Así que hoy me traslado de nuevo al norte de Europa, concretamente a la ciudad sueca de Gotemburgo.
Vamos a visitar un vivienda que pertenece a un edifico construido en la década de los 50 y que conserva elementos estructurales de aquella época.
Un vivienda pequeña pero muy luminosa, con pocas habitaciones pero muy bien estructuradas. Una vez más las tonalidades neutras y la madera son la clave de esta decoración nórdica.
Este apartamento me ha gustado especialmente por sus recursos decorativos. Mira como han conseguido con pocas piezas de mobiliario «low cost» y unos complementos sencillos decorar un espacio que resulta bonito y confortable.
Detalles como el papel de flores del hall, el azulejo negro de la cocina o la ventana vidriada del baño rompen con la neutralidad del resto de la vivienda.
Otros elementos como el parquet original de espiga o las repisas de piedra caliza de las ventanas le aportan un toque muy especial.
No hay duda que si quieres conseguir una decoración que te aporte calidez, nada mejor que elegir colores claros combinados con madera natural. Esta combinación en blanco-madera nunca falla.
Quizá te puede resultar demasiado anodina, por lo que habría que meterle un «toque de gracia». Para ello puedes incluir alguna pieza de diseño diferente.
Puede ser tanto una antigüedad como el mueble esquinero de la sala de estar o las sillas de estilo escandinavo de la cocina.
O algo más moderno que resulte llamativo como la lámpara de lunares del dormitorio. Son piezas completamente opuestas pero que cada una en su espacio adquiere un protagonismo especial.
vía: stadshem
Consigue este look de estilo nórdico.
Estas son algunas de las piezas con las que puedes conseguir una decoración del estilo de esta vivienda.
Ningún comentario