¿Quién no recuerda el mobiliario de formica de nuestras casas en los años 70? Pues si, una ya tiene sus años y me acuerdo perfectamente de los desayunos y las meriendas en la cocina rodeada de aquellos aparadores, sillas y mesas que ahora con la vuelta de lo «retro» se han convertido en objeto de deseo de los más nostálgicos.
La Formica es una resina plástica que en 1912 fue concebida como material aislante eléctrico que sustituyó de la mica, de ahí su nombre. Más tarde se comercializó como laminado para decorar las superficies de los muebles, teniendo su momento álgido en la década de los 60 y 70.
Una de las cosas que me quedé del antiguo Noveno Ce es un taburete de formica viejo y destartalado que tengo en la terraza y que utilizo como base para mi frondosa citronela pero que está pidiendo a gritos una segunda oportunidad. Así que buscando inspiración he encontrado varias ideas para renovar esta clase de muebles con resultados muy interesantes y divertidos.
Uno de los DIY que más me han gustado ha sido el de estas sillas, pero que podemos adaptarlo a cualquier mueble de formica, con el diseño que más nos guste o simplemente pintando toda la superficie de un mismo color.
Materiales necesarios:
- Papel de lija de 80 o 100
- Vinagre blanco, amoniaco diluido en agua o alcohol
- Una esponja y un paño de algodón
- Pincel o rodillo de espuma
- Pintura acrílica de colores
- Barniz mate
1. Lo primero de todo hay que limpiar bien la superficie a tratar con una esponja empapada en un poco de vinagre blanco o alcohol para quitar bien la suciedad y dejar secar bien.
2. Lijar suavemente haciendo pequeños círculos e ir limpiando la zona con un paño de algodón para retirar el polvo que vaya saliendo.
3. Para un mejor acabado se le puede dar una base de imprimación para sellar la superficie. Con una cinta de pintor marcar el área que queremos pintare ir aplicando con un pincel una primera capa de pintura, dejar secar aproximadamente una hora y repetir tantas veces como veas necesario. Entre capa y capa lija suavemente con la lija la superficie.
4. Cuando veas que la pintura ya está seca y suave al tacto, aplicar dos manos de barniz de acabado mate y ¡listo!
Para limpiar este tipo de superficies bastará con un paño de algodón un poco húmedo.
¿Tenéis algún mueble de formica para hacerle un cambio de look?
Vía: mamieboude